Comparte una terapeuta que ha estado asistiendo online a uno de los grupos:
“Pongo en valor de este grupo que el supervisor no haga a las veces la función de director del centro donde trabajo y que lxs participantes no formemos parte de un mismo equipo. Este echo comporta para mí, no sólo que la supervisión quede desprovista de cualquier connotación o interés empresarial, sino que también queda mucho más espacio para la supervisión de casos en detrimento de las dinámicas relacionales que, a mi entender, son más propias de grupos de terapia.
Para mi es muy fácil entrar en lo relacional y en este sentido el grupo está siendo un aprendizaje.
Aprecio mucho la capacidad de envolver de Manuel.
Es muy inspirador ver como toma y da el tiempo para que el puchero se haga a fuego lento. En este sentido puedo ver mi reactividad como terapeuta, como invado un espacio que es del paciente y no mío, y como voy rápido al juicio o a la solución. El tempo y la cadencia que propone en supervisión son un regalo para el cultivo de la curiosidad.
Otra cosa que pongo en valor del grupo de supervisión son las resonancias con lxs compañerxs y como poco a poco hemos ido revisando esa creencia que parece tan genérica: "mi valía como terapeuta depende del punto del proceso en el que se encuentre el paciente."
Agradezco el espacio para la reflexión, el espacio que se me ha dado para lo personal y el cuidado y la determinación en las devoluciones.”
Actualmente hay dos plazas disponibles. Si estás interesada/o en tener más información sobre mi puedes visitar mi página web www.paziencia.com y si quieres información sobre el grupo de supervisión escríbeme por privado siguiendo este enlace: t.me/manuelcuesta
“Pongo en valor de este grupo que el supervisor no haga a las veces la función de director del centro donde trabajo y que lxs participantes no formemos parte de un mismo equipo. Este echo comporta para mí, no sólo que la supervisión quede desprovista de cualquier connotación o interés empresarial, sino que también queda mucho más espacio para la supervisión de casos en detrimento de las dinámicas relacionales que, a mi entender, son más propias de grupos de terapia.
Para mi es muy fácil entrar en lo relacional y en este sentido el grupo está siendo un aprendizaje.
Aprecio mucho la capacidad de envolver de Manuel.
Es muy inspirador ver como toma y da el tiempo para que el puchero se haga a fuego lento. En este sentido puedo ver mi reactividad como terapeuta, como invado un espacio que es del paciente y no mío, y como voy rápido al juicio o a la solución. El tempo y la cadencia que propone en supervisión son un regalo para el cultivo de la curiosidad.
Otra cosa que pongo en valor del grupo de supervisión son las resonancias con lxs compañerxs y como poco a poco hemos ido revisando esa creencia que parece tan genérica: "mi valía como terapeuta depende del punto del proceso en el que se encuentre el paciente."
Agradezco el espacio para la reflexión, el espacio que se me ha dado para lo personal y el cuidado y la determinación en las devoluciones.”
Actualmente hay dos plazas disponibles. Si estás interesada/o en tener más información sobre mi puedes visitar mi página web www.paziencia.com y si quieres información sobre el grupo de supervisión escríbeme por privado siguiendo este enlace: t.me/manuelcuesta
Me tomo el verano para meditar si continúo o no (y cómo) con el programa de radio. Y os quiero preguntar, en el caso de continuar por el formato.
Anonymous Poll
51%
Semanal, igual que antes
36%
Quincenal
9%
Mensual
51%
Con entrevistas
38%
Mismo formato
16%
Con vídeo
51%
En esta plataforma
7%
En twitch
Y por los contenidos (deja las sugerencias que veas en los comentarios si no está la opción en la encuesta):
Anonymous Poll
70%
Un tema por encuentro
17%
Picadito, de actualidad
42%
Con colaboradores
30%
Con las preguntas que traigan los oyentes en tiempo real está bien
33%
Votar desde el canal cada el tema
39%
Hacer de vez en cuando uno para tratar información política y económica
Paso por aquí para dejaros una reflexión sobre el juicio a Julian Assange en la edición española de Le Monde Diplomatique, y otra de Ignatius sobre las vacaciones es y el vacío.
https://mondiplo.com/mimos-a-pinochet-palos-a-assange
https://mondiplo.com/mimos-a-pinochet-palos-a-assange
Mondiplo
« Mimos a Pinochet, palos a Assange » - Le Monde diplomatique en español
La prensa establecida en Estados Unidos, Reino Unido y Australia sigue al parecer sin percatarse del peligro existencial que el juicio a Julian Assange supone para la libertad de prensa, las garantías procesales, la democracia y el Estado de derecho
En el enlace que dejo al final, sobre los beneficios de aburrirse, encontraréis referencias a varios estudios más que interesantes desde diferentes miradas.
Es más que probable que el rechazo que sentimos frente al aburrimiento sea un impacto para el cerebro muy perjudicial. Evitar el aburrimiento podría traducirse por una innecesaria sobreestimulación de estímulos y pensamientos, y puede que esto contribuya a un profundo malestar y que influya en determinadas enfermedades.
Quedarse en silencio sin otra cosa que hacer que contarse los pelos de la rodilla no tiene buena fama. Porque una cosa es distraerse y otra la patología de la distracción. Y en la otra polaridad está la evitación patológica del aburrimiento.
Aburrirse no es nada productivo. Meditar, contemplar la nada, estarse con uno en silencio, no entra dentro del aburrimiento.
Y es que, por lo general, frente al vacío del no hacer y aburrirse, nos encontramos con lo pendiente, con lo evitado, se asoma algo que consideramos como un abismo. Y ya se sabe que cuando uno mira el abismo este te devuelve la mirada.
Aburrirse, a conciencia y por amor, es un acto de salud, de coraje y de madurez.
Por qué aburrirse es bueno para el cerebro
Almudena de Cabo
BBC News Mundo
https://www.bbc.com/mundo/noticias-63972729
Es más que probable que el rechazo que sentimos frente al aburrimiento sea un impacto para el cerebro muy perjudicial. Evitar el aburrimiento podría traducirse por una innecesaria sobreestimulación de estímulos y pensamientos, y puede que esto contribuya a un profundo malestar y que influya en determinadas enfermedades.
Quedarse en silencio sin otra cosa que hacer que contarse los pelos de la rodilla no tiene buena fama. Porque una cosa es distraerse y otra la patología de la distracción. Y en la otra polaridad está la evitación patológica del aburrimiento.
Aburrirse no es nada productivo. Meditar, contemplar la nada, estarse con uno en silencio, no entra dentro del aburrimiento.
Y es que, por lo general, frente al vacío del no hacer y aburrirse, nos encontramos con lo pendiente, con lo evitado, se asoma algo que consideramos como un abismo. Y ya se sabe que cuando uno mira el abismo este te devuelve la mirada.
Aburrirse, a conciencia y por amor, es un acto de salud, de coraje y de madurez.
Por qué aburrirse es bueno para el cerebro
Almudena de Cabo
BBC News Mundo
https://www.bbc.com/mundo/noticias-63972729
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Se puede ver la progresion exponencial del aumento de la termperatura en el cono final a partir de los años 80.
He conocido terapeutas muy reconocidos negacionistas del cambio climático. Muchos no le dan importancia y otros, aunque lo valoran, no hacen públicas sus preocupaciones ni posicionamiento. ¿A qué se debe? ¿Hay algo más urgente que esto?
La urgencia implica unión. Un proceso que nos coloque en la igualdad y un objetivo común. Eso implica deshacer prejuicios y la ideología reinante: el individualismo (del que pecan muchas corrientes terapeuticas, gestalt, incluida).
Hay dos palabras que siempre deben estar sobre la mesa en cualquier debate serio sobre cambio climático: colaboracionismo y decrecimiento.
He conocido terapeutas muy reconocidos negacionistas del cambio climático. Muchos no le dan importancia y otros, aunque lo valoran, no hacen públicas sus preocupaciones ni posicionamiento. ¿A qué se debe? ¿Hay algo más urgente que esto?
La urgencia implica unión. Un proceso que nos coloque en la igualdad y un objetivo común. Eso implica deshacer prejuicios y la ideología reinante: el individualismo (del que pecan muchas corrientes terapeuticas, gestalt, incluida).
Hay dos palabras que siempre deben estar sobre la mesa en cualquier debate serio sobre cambio climático: colaboracionismo y decrecimiento.