🌍 CONCIENCIA MUNDIAL 🇪🇸

👀 👉 EXCELENTE COLUMNA, AL MENOS ESO PIENSO YO, DE MI HERMANO LUIS ARAMBURU EN LA WEB DE "LA RECONQUISTA.

💥 “SOBRE LOS QUE PROPONEN LA ABSTENCIÓN EN UN MOMENTO CLAVE E HISTÓRICO PARA NUESTRA ESPAÑA”. 🇪🇸

- Por LUIS ARAMBURU

Entre los asistentes a un partido de fútbol, cabe distinguir al «aficionado» del «hincha». Mientras el primero tiene un discurso racional, el segundo está imbuido por un discurso emocional. En política, lo emocional es atávico y telúrico, inherente al folclore y al terruño. Convendrán conmigo que en nuestra sociedad hace lustros que se instaló el hooliganismo en política. Se vota dejándose llevar por los más bajos instintos.
Me recuerdan al aficionado al fútbol que llega a la taquilla del estadio con el partido ya comenzado y, mientras compra su entrada, le pregunta al taquillero: “¿Cómo vamos?” Y le responde: “Mal, 0-1”. Y el aficionado grita: “¡Árbitro, hijo de pura!”.
Y si resulta que un Juez y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado encuentran indicios de criminalidad en “su” partido, lo fácil es el “y tú más”, o remover el árbol genealógico del Juez que investiga.
Como sociólogo, echo en falta el apartado en las encuestas de no sabe/no contesta, que en ocasiones era el grupo más nutrido. Ahora todo el mundo sabe y contesta, todo el mundo opina, y –como decía Ortega y Gasset– opinar es teorizar. Para ello sobran escrúpulos, pero falta conocimiento.
No recuerdo quién definió la democracia como el gobierno de la mayoría y el respeto a las minorías. Nuestro país, históricamente no democrático –yo mismo no soy demócrata–, está en las antípodas de este aserto, pues estamos bajo la tiranía de la democracia, es decir, el gobierno de las minorías con el desprecio a la mayoría. Hace décadas que nos gobiernan las minorías: El IBEX 35, el lobby gay, el lobby feminista, los terroristas de Bildu, el lobby abortista, los nacionalismos excluyentes… Por sí solos no harían nada, pero juntos, en un totum revolutum, nos están gobernando. La sociedad española se ha convertido en una sociedad apática, inane, inerme.
Para ilustrar esto basta con analizar la prohibición de las corridas de toros en Cataluña. Ésta surgió de una iniciativa legislativa popular con la recogida de 150.000 firmas de los auto-denominados “antitaurinos”, ante la pasividad de los taurinos, los cuales –y yo me incluyo– no movieron un dedo para recoger firmas en sentido contrario. De haberlo hecho, estoy convencido de que las mismas se hubieran multiplicado por diez: 1.500.000 firmas. Y el resultado fue que se abolieron las corridas de toros, ¡cuando Barcelona ha sido la ciudad más taurina del mundo!
La sociedad española, en general y desde todos los ámbitos, asiste a la difusión de todo tipo de mentiras con total pasividad, narcotizada por los medios de comunicación. El Poder –me refiero al «poder» de verdad– se ejerce con un nepotismo y una impunidad no conocidos en la Historia. Un claro ejemplo de esto es lo que estamos viviendo con las mentiras del presidente Sánchez y, últimamente, con sus promesas electoralistas que han convertido a este Gobierno en un mercado persa.
Lo que más me entristece es el «aborregamiento» –fruto del adocenamiento intelectual perpetrado por los poderes públicos desde hace décadas– del que hace gala un alto porcentaje de sus partidarios, de ambos lados, y que muy pocos se han parado a meditar los principios que inspiran al bando que defienden, peones de una partida de ajedrez que no es la suya. Pero sí es la nuestra.
El próximo día 28 hay una nueva cita electoral. Municipales y autonómicas. España se enfrenta ante uno de los momentos más dramáticos de los últimos 80 años. Y todavía hay “líderes de opinión” –considerados supuestamente de la derecha– que estén fomentando el abstencionismo.
Estamos en un momento excepcional, por consiguiente, esta convocatoria electoral es “excepcional”, o “elecciones de cambio”. Cuando hay indignación social, como la hay, es más bajo el abstencionismo.

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3.27K viewsAgustín, edited 05:14